Los geranios son plantas ornamentales un poco exigentes. En este artículo te vamos a explicar las 5 principales causas por las cuales las hojas de los geranios amarillean.
El geranio necesita un suelo rico en nutrientes. Este es uno de los motivos más recurrentes por los cuales las hojas amarillean. Se recomienda realizar un cambio de sustrato cada dos años para que el suelo contenga niveles de nitrógeno adecuados.
El exceso de riego puede ser otra causa por la que tus geranios empiezan a amarillear. Las hojas además se reblandecen. La solución en este caso es simple, basta con eliminar las hojas amarillas y esperar a que el suelo seque mejor.
Por otro lado, la falta de riego también puede producir un efecto similar. En este caso, las puntas de los bordes se secan. Riega con más frecuencia o generosidad y eliminarás este problema.
El geranio es una planta resistente al frío, por debajo de los 15ºC la planta se mantiene en estado vegetativo, pero sigue viva. Hay que protegerlos de las heladas pues una helada muy dura puede quemar las hojas y matar al geranio.
El taladro del geranio es una plaga producida por la mariposa del geranio. Para evitar esto lo mejor es prevenir con insecticidas específicos pues cuando empezamos a ver los síntomas puede ser demasiado tarde. La mariposa del geranio pone sus huevos perforando el tallo y las larvas se alimentan del mismo hasta agotar la planta.