Flores de otoño

El luminoso verano, deja paso a una época de cielos grisáceos, pero es gracias a ellos que las flores de otoño de nuestro jardín lucen más que nunca. Y esto se debe, al contraste creado entre las tonalidades apagadas del cielo y los colores vivos de las flores de otoño que te presentaremos a continuación. Es hora de hacer que nuestro jardín brille con luz propia. ¡Vamos allá!
¿Qué flores de otoño os recomendamos?
Os pasamos una lista de las flores que podéis plantar en vuestro jardín para disfrutar del otoño;

• Anémona: Esta preciosa flor de otoño adornará tu jardín con una belleza intensa pero sutil. La anémona guarda su tesoro durante la noche y se abre durante el día. Flor de tallo largo y diferentes tonalidades (rojas, violetas, blancas…) que aporta una sensación de tranquilidad armoniosa, la cual te invitará a pasear. Conocidas como “la flor del amor intenso”, estas flores son una gran elección para el otoño.
• Crocus: Su color malva intenso, ofrece a quien la observa un juego de tonalidades exquisito. Todo ello adornado con estambres de colores dorados en el centro de la flor. Estos estambres, son el tan conocido y preciado azafrán, que al igual que en nuestros platos adorna el conjunto, ofreciendo un contraste magnífico con el color de los pétalos.
• Crisantemo: La amplia gama de colores ofrecida por esta flor, la convierte en un indispensable de nuestro jardín. Desde colores amarillentos a rojizos, pasando por rosados hasta blancos, esta flor idónea para el otoño por su adaptación a climas fríos, mantendrá su alegría hasta inicios de primavera.
• Lavanda de Mar: Al crecer en grandes cantidades y en grupos, aportan una presencia y una elegancia interesante. Y en conjunción con el verdor y la abundancia del otoño, crean una composición ordenada pero atractiva. Estas flores de rápido crecimiento, desprenden un perfume que logrará que te enamores de ellas.
• Dalia: La Dalia es una planta de llamativas flores originaria de México. Una flor con una durabilidad importante y que necesita mucha luz, aunque preferiblemente una que no se le proyecte de forma directa. Combinada con macetas sencillas que no eclipsen su belleza, son la chispa de color que necesita el otoño.